La semana pasada comenzó la vuelta al cole para miles de niños en España. Este inicio de curso, coincide como cada año en un aumento de riesgo a padecer enfermedades por contagio en las clases. Según los estudios, los niños menores de 10 años son los más vulnerables a contraer enfermedades tras la vuelta al cole.
Entre las enfermedades más comunes se encuentra los resfriados, amigdalitis o las otitis. Pero todas ellas se pueden combatir con el yogur helado en nuestra dieta. Al incluir este alimento, prevenimos estas enfermedades que nos debilitan y nos dejan sin fuerzas.
Los niños menores de 10 años son los más vulnerables a contraerlas, y el hecho de que su incorporación al colegio coincida con el inicio de actividades extraescolares y el deporte, hace que sea aún más importante el consumo del yogur helado. Ya que le aportarán la proteína y el calcio que necesitan para prevenir cualquier tipo de lesión.
Incluirla en la dieta de nuestros hijos es un factor primordial para empezar el nuevo curso con buen pie.
Enfermedades comunes como los resfriados, amigdalitis o las otitis se pueden combatir directa o indirectamente con el yogur dentro de la dieta. Gracias a ser una fuente de proteínas y vitaminas, ayuda al organismo de los pequeños a activar sus defensas y así prevenir estas enfermedades. En el caso de las otitis los probióticos son un complemento ideal para el yogur.
Mientras dormimos perdemos una gran cantidad de nutrientes. Por ello, incluir lácteos en el desayuno nos ayuda a reponerlos.
El desayuno es considerado la comida más importante del día, pues aporta a nuestro organismo los nutrientes necesarios para afrontar el día, especialmente en el período escolar. Los expertos recomiendan que el desayuno suponga el 30% de las calorías diarias.
La presencia de la leche y productos lácteos dentro del desayuno es fundamental ya que, se trata de alimentos ricos en nutrientes esenciales como: los hidratos de carbono, las proteínas, el calcio de fácil asimilación, vitaminas y minerales. Si todavía no los añades, es el momento de incluirlos en la primera comida del día.
La merienda, aunque para muchos es la gran olvidada, es el segundo momento del día importante para incluir el yogur natural en la dieta de los más pequeños.
Nuestra recomendación es añadir en el yogur algunas piezas de frutas frescas, ya que son una importante fuente de vitaminas, minerales, fibra y antioxidantes. Eligiendo siempre que se pueda, frutas de la temporada. Si queremos una merienda más completa podemos añadir además de frutas naturales; cereales.
La cena es el último momento del día. Y una oportunidad perfecta para incluir el yogur en ella. Se estima que los niños deben tomar entre dos y cuatro raciones al día de lácteos y en este sentido, dos yogures equivalen a una ración.
Los expertos recomiendan incluir este alimento por su multitud de beneficios en las dietas de todas las edades, no existiendo un límite de edad para incluir este alimento en la dieta de los niños.
¡No esperes más para incluirla en su alimentación!